19 octubre 2009

NOBLEZA OBLIGA

Cuando alguna persona pública es víctima de un ataque malicioso e injustificado, ninguna persona bien nacida puede quedarse cruzada de brazos.

Si además los que están siendo atacados son dos buenos amigos, que ejercen con seriedad el periodismo y que, más allá de ser polémicos en sus reflexiones y en sus opiniones, son personas honestas, no hacer nada es casi como ser partícipe de ese ataque.

Es el caso de Carlos Pagni y de Juan Manuel Romero (de izquierda a derecha, respectivamente, en la foto de este post), dos periodistas a los que conozco, por los que tengo gran afecto personal, a quienes muchas veces he visto trabajar con un profesionalismo y de cuya ética y honestidad no tengo dudas.

Carlos Pagni es uno de los editorialistas más leídos del diario La Nación.

Juan Manuel Romero es un conocido periodista radial.

Son personas que con el transcurso de los años se han convertido en lúcidos observadores de la realidad política y económica del país.

Son personas con las que mucha gente quiere relacionarse.

Ambos complementan su trabajo periodístico con la elaboración de un informe sobre cuestiones políticas y económicas al que cualquiera puede acceder a través de una suscripción.

Carlos Pagni es el responsable del contenido y Juan Manuel Romero tiene a su cargo los aspectos comerciales.

¡Hasta en eso han tomado la precaución de que la persona que escribe el contenido del informe no sea la misma persona a la que quien quiere recibirlo tenga que llamar, de modo que no haya ninguna mala interpretación posible!

Hace unos días una persona que trabajó hace algún tiempo en YPF los llamo para presentarle a gente de un grupo extranjero que tenía cosas que contarles de esa empresa y de sus dueños. En la reunión con Carlos Pagni estas personas sólo le contaron cosas que ya sabía y le pidieron algunas cosas con las que él no se sintió cómodo.

Cuando lo llamaron para una segunda reunión, resolvió ir pero sólo a fin de no hacer quedar mal a quien oficiaba de intermediario. Fue una reunión corta y Carlos Pagni simplemente se retiró y se olvidó del tema.

Paralelamente a esto, la misma gente había contactado a Juan Manuel Romero con el argumento de que querían comprar el informe político que elabora con Pagni. Juan Manuel Romero les dio un nombre de usuario y una clave para que lo probaran y luego los incorporó a la base de clientes estables.

A la hora de pagar, argumentaron que no tenían una sociedad formal en el país, por lo cual harían el pago en efectivo. Lo invitaron a tomar un café y allí le entregaron el dinero en un sobre. El mismo proceso se repitió una segunda vez y luego no volvió a saber de ellos.

Hace unos días apareció en YouTube un video elaborado con partes de filmaciones que alguien hizo de los encuentros de esta gente con Carlos Pagni y con Juan Manuel Romero.

Está armado de modo tal que hace suponer que Carlos Pagni y esta gente tienen algún tipo de acuerdo y que Juan Manuel Romero recibe un sobre con el supuesto pago por ese acuerdo.

¿Cómo hace alguien para defenderse de una cosa así?

¿Por qué la persona que hizo de intermediario entre Carlos Pagni y Juan Manuel Romero y estos misteriosos personajes no aparece y da alguna explicación?

¿Por qué la empresa extranjera a la que estos señores dijeron pertenecer tampoco dice nada?

Fuera de la explicación de Carlos Pagni publicó sobre lo ocurrido, lo único que salió en los diarios fue una solicitada de YPF acusándolo de atacarla en forma permanente, con el argumento que en el año 2009 lleva publicadas 11 notas en las que hace algún comentario negativo sobre la empresa.

No es mi función polemizar con una empresa ni hacer de investigador privado.

Pero como conozco a las dos personas que están siendo atacadas, no quiero dejar de expresar mi simpatía y mi solidaridad con ellos.

Me encantaría que por una vez se lleve adelante una investigación seria y se establezca qué fue lo que pasó.

¿Habrá alguien que lo haga?

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